
Las orugas pueden ser lindas, suaves al tacto e incluso hermosas de contemplar por sus diseños intrincados y coloridos. La intención de las orugas es convertirse algún día en mariposas o polillas, pero no por ello todas son indefensas.
Aproximadamente con 2,5 pulgadas de largo, la oruga de la polilla buck es una de las orugas venenosas más grandes y hermosas de Alabama. Su picadura provoca un dolor inmediato e irradiado, seguido de picazón, enrojecimiento e hinchazón que pueden durar hasta una semana.
Las orugas venenosas son más activas a finales de primavera a lo largo del verano y principios de otoño. No son agresivas, pero algunos están equipados con pelos urticantes llenos de veneno como mecanismo de defensa.
La oruga más peligrosa en Alabama se conoce como oruga de áspid o gato. No se mueve mucho y sus colores y diseño son muy suaves. Parece una pequeña peluca rubia, marrón o gris, pero su veneno es insoportable.